Para padres que no saben qué hacer con sus hijos, o no quieren ocuparse de ellos, existe esta posibilidad donde los adolescentes son contenidos, no traen problemas y son atendidos por verdaderos profesionales.
Así como llega un momento de la vida, en la tercera edad, donde los ancianos deben ser atendidos como corresponde, donde la familia no quiere hacerse cargo de ellos y donde realmente resultan un verdadero problema, una iniciativa privada situada en Villa General Belgrano, Córdoba, aparece como una verdadera ayuda para los padres: el primer geriátrico para adolescentes.
Así como llega un momento de la vida, en la tercera edad, donde los ancianos deben ser atendidos como corresponde, donde la familia no quiere hacerse cargo de ellos y donde realmente resultan un verdadero problema, una iniciativa privada situada en Villa General Belgrano, Córdoba, aparece como una verdadera ayuda para los padres: el primer geriátrico para adolescentes.
Si usted tiene un hijo violento, contestador, maleducado, inútil o similar, esta institución los cobija para que estos chicos dejen de ser una molestia en la casa y los padres puedan desarrollar su vida con más tranquilidad, sabiendo que los adolescentes tendrán un ambiente acorde con sus necesidades.
¿Cómo trabaja esta institución? Desarrolla un programa de diferentes actividades. El adolescente llega y allí puede encontrar un cuarto confortable que puede pintar con grafittis o empapelarlo con sus posters preferidos .Así, se gana por dos lados: los padres no tienen que pegar cuatro gritos para que no lo haga en su propia casa y los chicos pueden tener el cuarto que siempre soñaron.
Así, el instituto les permite escuchar música a todo volumen, romper muebles, quemar cortinas, romper vidrios y todo lo que él necesite para desarrollar sus conductas, todo siempre dentro del costo de la cuota mensual que los padres deben abonar.
El instituto también brinda la posibilidad de la discoteca diaria donde pueden emborracharse libremente, unirse en grupos y pelear contra otros adolescentes . Esto claramente ahorra a los padres los problemas de preguntar a sus hijos con quién anda, por qué vuelve ebrio a casa y por qué tiene una herida de arma blanca en el tórax.
El instituto cuenta también con un equipo de profesionales dispuestos a escuchar a los adolescentes: sus gustos, sus placeres, sus ideas, sin encontrar la oposición y el consejo de los padres reales que siempre traen discusiones y disgustos, que gracias a este instituto pueden evitarse en gran forma. Pueden, además, vestirse cómo se les da la gana.
El instituto abrió sus puertas a finales del 2002 y ya cuenta con 230 adolescentes. Los padres pueden ir a visitarlos cuando lo deseen aunque, según las estadísticas que nos brindan las autoridades, el 82 por ciento de ellos no han aparecido nunca, ni siquiera telefónicamente.
Los interesados en esta notable propuesta pueden conectarse vía mail a instituto@geriatricotopten.com.ar. Allí le brindarán mayores precisiones sobre una idea que, en la práctica, ha resultado ser más que satisfactoria. Los padres se quitan un problema de encima y los chicos, también.
